De ruina en ruina (1)

IGLESIA DE SAN NICOLÁS DE CASTROVERDE DE CAMPOS (ZAMORA)
JIMB


Es la imagen de la desolación, de la impotencia. Año tras año, el tiempo va haciendo mella en ella. Llegará un día que, si no se pone remedio, quedará sólo la torre y hasta es posible que también esta desaparezca, haciendo así realidad la máxima de Lucano (etiam ruinae periere).

La iglesia de San Nicolás es el ejemplo de la desidia, del abandono. Ubicada en el corazón de la villa, fue vista y descrita por Gómez Moreno a principios del pasado siglo. Su interior contaba con un retablo plateresco y con pinturas barrocas de influencia velazqueña. Nada queda.

El sabio granadino describe la torre, que es prácticamente lo único que permanece hoy en pie:

"La torre, en sus dos tercios, es de sillería basta, con ventanas, ya de arco redondo y columnitas según la tradición románica, ya góticas treboladas, con su mainel y claraboyas, ya de arco agudo a chaflanes, acercándose a lo del siglo XIV. El último tercio es de obra morisca de ladrillo, como tantas otras, con parejas de arcos apuntados, dobles y recuadrados, y frisos de esquinillas; cedrá poco en antigüedad a la de abajo (Santa María)".

La torre de San Nicolás fue incoada Bien de Interés Cultural en 1983. El expediente, pues, lleva 23 años esperando una resolución que no llega. Así son las cosas en la Dirección General de Patrimonio de la Consejería de Cultura.