Manuscritos medievales (2)

EL PSOE PIDE PROTECCIÓN PARA NUEVE CÓDICES LEONESES ÚNICOS EN EL MUNDO

Algunos manuscritos de la Catedral y San Isidoro precisan vitrinas blindadas que garanticen su conservación

Verónica Viñas

Diario de León Nueve auténticas joyas bibliográficas. Cinco códices de la Catedral y otros cuatro de San Isidoro únicos en el mundo. El PSOE reclama a las Cortes de Castilla y León la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) para estos manuscritos de un valor incalculable. «Una magnífica contribución al 1.100 aniversario del Reino de León», en opinión del procurador socialista José Ignacio Martín Benito, que será el encargado de defender esta propuesta en la Junta. Los socialistas confían en contar con el apoyo del PP, que finalmente también secundó la declaración de BIC para el filandón y apoyó la protección de la lengua leonesa.
La Junta sólo ha reconocido como BIC un manuscrito medieval: el que se guarda en la biblioteca del monasterio de Nuestra Señora de la Vid (Burgos).
El antifonario de la Catedral, uno de los nueve códices para los que el PSOE pide la protección BIC, será objeto de un congreso internacional en marzo del próximo año, en el que participarán los mayores especialistas del mundo. Es un manuscrito excepcional del siglo XI y único antifonario mozárabe que se conserva completo. Además, la gran biblioteca virtual de Europa, creada por la Comisión Europea y que reúne los mejores fondos documentales del continente, pretende digitalizar esta joya y colgarla en la red, para que esté a disposición de cualquier internauta.

Blindados

Igualmente excepcional es el Libro de las estampas o libro de los testamentos de los reyes de León, con miniaturas increíbles de los monarcas. Lamentablemente, la Catedral lleva años reclamando unas vitrinas especiales para conservar estos tesoros, que permitirían exhibir cada manuscrito tras un cristal blindado, para protegerlo no sólo de posibles robos, sino para garantizar la conservación de códices que requieren condiciones especiales de humedad y de luz, con el fin de mantener intactos los pergaminos y pigmentos que utilizaron los monjes y calígrafos que los iluminaron hace más de nueve siglos. Tampoco San Isidoro muestra a los miles de turistas que cada año pasan por el museo sus mejores joyas bibliográficas, aunque en el 2002 el Cabildo prestó a las Edades del Hombre que se celebraron en Nueva York la biblia románica (siglo XII).

Foto: Biblia mozárabe de San Isidoro.

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